
Cómo “juegan” en la enseñanza inicial los escenarios lúdicos del jardín infantes de Progreso
El Jardín de Infantes “Martín de la Peña” Nº 131, Nivel Inicial de la localidad de Progreso, es ese lugar que al entrar te transporta a la niñez. Es cálido, colorido, alegre y lleno de vida. Los alumnos que asisten a diario son 112 en total, divididos en turnos de mañana y tarde en salitas de tres, cuatro y cinco años. También se suman los anexos rurales de la Escuela 1183 en la zona norte, la Escuela N° 342 zona sur-“Tomas Godoy Cruz”-, y el anexo de nivel inicial de la Escuela N° 6052 de Hipatia.
“Ser felices en nuestro lugar de trabajo y hacer que los niños disfruten, es nuestro mayor objetivo”, dijo la directora, Fernanda Rudolf a El Santafesino.
El jardín está dividido es espacios lúdicos diseñados para que los niños y niñas desplieguen su imaginación, jueguen, inventen, exploren y transformen. Que logren aquello que la pedagogía Montessori llama, la autonomía, independencia para elegir qué hacer y cómo aprender. Que tengan iniciativa, curiosidad, concentración. Se apropien del amor por el orden, y sobre todo, posean autodisciplina y autoconocimiento.
Pensar escenarios lúdicos después de la pandemia
La docente Fernanda Rudolf asumió tras la pandemia al frente del jardín Martín de la Peña. Ella conocía la institución porque trabajaba como seño. Sin embrago, fue un desafío asumir en esa época: “volvimos con las burbujas y los espacios entre los alumnos, lo que significó adecuarnos a las normas y poder crear los espacios para ellos”, contó.
La pandemia dejó en las nuevas infancias, una atención acortada, una necesidad de la inmediatez y niñas y niños sobreestimulados, por eso se comenzó a pensar en los espacios de experiencias múltiples, en los que según explicó Fernanda, los alumnos pudieran rotar, cambiar de lugar y realizar las actividades propuestas en cada uno de los escenarios lúdicos preparados.

La directora además comentó que los escenarios lúdicos de experiencia son espacios que a través de la rotación, los pequeños van aprendiendo y compartiendo con sus compañeros: “después de la pandemia fue difícil proponernos abrir las puertas desde el cuidado y el distanciamiento, por eso se pensó abordarlo desde otro lugar, cambiando la modalidad”.
Desde ahí se reorganizó el jardín. “Ya no tenemos más salas por edades. Los estudiantes van rotando, tienen esta apropiación, conocen todos los espacios y van trabajando según el tema que les toque. Cada dispositivo lúdico está preparado según la actividad que la seño propone”, explicó.
Espacios de las Inteligencias Múltiples
La teoría de las Inteligencias Múltiples, desarrollada por el psicólogo estadounidense Howard Gardner, propone ocho tipos de inteligencias asociadas a distintas capacidades cognitivas de los alumnos. Tomando la pedagogía de estas inteligencias múltiples, el jardín cuenta con salas de robótica, Mundo Mágico, literatura, biblioteca, Recrearte. Rico y Sabroso. 1,2,3: Jugar otra vez, construcción, matemática, laboratorio y un área de actuación: “Que comience el show”.
En cada uno de los espacios, las niñas y niños aprenden con las tablets, computadoras, geometría y matemática. Investigan en microscopios, lupas, balanzas. Dramatizan y actúan. Juegan con la casita y sus muñecas. Trabajan y construyen con la carpintería y recrean con los dibujos, la plástica y la gráfica. “Tenemos la sala de música, y otra de lo rico y sabroso”, añadió Fernanda. Es allí donde los alumnos desayunan, meriendan y retoman los hábitos de sentarse y compartir con el otro.
El gran desafío que significó asumir al frente de un jardín de excelencia en la educación, hizo que desde la dirección junto al equipo docente se busque fomentar la autonomía e independencia de cada alumno. “Cada uno se expresa en lo que más le gusta y se siente cómodo”, continuó.
El papel de los docentes
Al jardín N° 131 lo conforman todo un equipo de docentes que trabajan mancomunadamente: “ser docente es realmente la vocación de servicio, brindarse, no solo con tu equipo o tus compañeras, sino con tus alumnos. Sentirse bien. Somos felices haciendo lo que nos gusta”, expresó.
Gracias al respaldo del equipo docente, del Club de Madres, de la Cooperada y de la Comuna local, se puede trabajar de manera excelente “porque siempre están al pie del cañón y en la inmediatez de las necesidades que van surgiendo”, anexó.

Finalmente, la directora comentó que la institución educativa en su rol, ofrece charlas, talleres y herramientas a los padres para acompañar en esto de las nuevas infancias. Rudolf habló de la tecnología, el vínculo, el tiempo de calidad que se tiene con los niños y niñas, el compartir cosas cotidianas y la cuestión de los límites: “el no, es amor”. Por eso siempre “estamos pensando en todas las herramientas para acompañar a las familias y docentes”, concluyó.
El jardín Martín de la Peña, Nivel Inicial es sin lugar a dudas, un espacio ideal para que los más pequeños disfruten de su infancia y de sus primeros vínculos con sus compañeritos. Creciendo juntos, descubriendo el mundo y aprendiendo de la mano de la seños y el jardín.