
Javier Martín: “Santa Fe tiene un potencial productivo espectacular”
En los últimos años, los síntomas de industrialización consolidaron el perfil de la ciudad y su región, desplazando a un segundo plano su faceta de sede administrativa a nivel provincial. Sin embargo, para que ese potencial se cristalice definitivamente debe lograrse un impulso más fuerte de parte de los estados en sus distintos niveles. Desde esa perspectiva, el nuevo titular de la Unión Industrial de Santa Fe, Javier Martín, hace su aporte para hacer efectiva esa meta.
En el marco de la continuidad de un proyecto de trabajo en la entidad, asumió recientemente la conducción luego de la dinámica gestión que encabezó Alejandro Taborda. “En esa continuidad, con un grupo humano que se renueva de manera permanente, mantenemos una tendencia: la defensa de la industria nacional, de la pequeña y mediana industria, y la protección del empleo argentino. En consonancia con Fisfe y la UIA, siempre tratamos de hacer nuestro aporte para el fortalecimiento de políticas industriales, tanto sea de la provincia, como de los distintos estamentos comunales y municipales, en particular, del Área Metropolitana” señaló a El Santafesino.
El objetivo es el mismo: “Promover asentamientos locales de la industria porque estamos convencidos que este es el camino: fortalecer la pequeña y mediana industria en el lugar que estén porque esto permite el arraigo, genera empleo y crea valor. Por eso estamos muy a favor de la promoción de las áreas y parques industriales. Siempre desde una política planificada, sin que se trate de sacarse a la industria del ejido urbano sino radicarla en un lugar donde se generen sinergias entre las industrias y con la infraestructura adecuada”.
Justamente ese es el principal condicionante. Luego de una década de apertura de enclaves industriales, el desafío pasa ahora por equiparlos para una puesta en funcionamiento plena. “El mayor trabajo pendiente es la infraestructura. Porque la industria en una planta urbana –en la mayoría de los casos– tiene energía eléctrica, gas natural, pavimento, telefonía, internet, etc. Cuando sacamos esa empresa de la ciudad, empiezan los interrogantes: ¿podré sacar mi producción, dispondré de servicios, tendré comunicaciones? Allí se generan las necesidades básicas estructurales y que muchas veces son de una magnitud que están más allá del alcance de una comuna o municipio. Entonces, además de crear un área, hay que poblarla y la forma de hacerlo es inducir a la empresa, pero con ayuda, porque el empresario ya asume una inversión con la construcción de su planta por ejemplo”.
Y en ese orden, es clave el acceso al crédito. Para Martín la tarea del gobierno provincial a través del Plan Industrial es positiva. “Las líneas de financiamiento son buenas. Están monetizadas más de un 50%. Y se han presentado proyectos por un valor tres veces mayor de lo que ofrece la línea de crédito. El gobierno provincial está haciendo un excelente trabajo” destaca convencido. En el mismo sentido, sostiene que las políticas de empleo son acordes y la UISF hace su aporte a través del compromiso con las prácticas profesionalizantes y la articulación con las Oficinas de Empleo.
En síntesis, su mirada sobre la ciudad y la región, conlleva un mensaje claro y estimulante. “De las 5.000 industrias que tiene la provincia, la capital y su área metropolitana tienen más de 1.200. Santa Fe tiene una oferta muy variada de productos, de industrias y tiene un capital social impresionante: universidades, centros de investigación, un parque tecnológico. Hay una potencialidad enorme, muchas Pymes y un sector del agro con tecnología de punta. El potencial productivo es espectacular, el desafío es de qué manera los distintos sectores público y privado trabajamos en conjunto para trasladar esa potencialidad a la realidad”.
¿Importaciones sí o no?
“No estamos en contra de las importaciones”. La aclaración pertinente radica en el impacto y las repercusiones que ha generado el diagnóstico surgido del Observatorio de Importaciones, donde los industriales juegan un rol protagónico junto al gobierno provincial. “Todo país que quiere insertarse en el mundo debe hacerlo a través de la importación y la exportación. Pero también decimos que ningún país regala el mercado interno y todos deben basarse en sistemas de administración del comercio exterior. Hay sectores sensibles, que generan mucho empleo, de tecnología propia o aquellos que necesitan importar. Pero todo debe estar coordinado y en particular las importaciones, que deben hacerse en un contexto de gradualidad, de racionalidad y en función de los intereses del país. Porque sino ocurre que determinados actores económicos importan en función de la economía individual que no necesariamente es la economía social. Estamos a favor de incorporar tecnología, capital, pero tenemos que ser cuidadosos a la hora de importar bienes de consumo porque eso se queda con parte del mercado local. Consideramos que la industria atraviesa un camino de mejora de su competitividad y para eso son necesarias más inversiones, y eso es importación. Incorporar capital para sumar más capital e incrementar la producción”.