
Con enormes desafíos, los alumnos de 7° grado regresaron a la presencialidad en Progreso
Desde el Ministerio de Educación de la provincia se informó a los establecimientos escolares que se debían regresar a las aulas para finalizar el ciclo 2020, ajustándose a los protocolos vigentes: distanciamiento social de un metro y medio o dos metros, reducción de personal en las escuelas, sanitización de los espacios, uso de barbijo, y burbujas de alumnos.
En diálogo con El Santafesino, la directora de la Escuela Primaria “José María Paz N° 341”, Alejandra Vijarra, contó que cuando se pensó en el regreso, enseguida se armó para el grupo de 7mo: “pedían grupos de alumnos chicos, entonces se armaron las burbujas”.
Cuatro aulas fueron dispuestas para la vuelta: son “burbujas de 9 y 8 chicos que funcionan en salones separados”. Los estudiantes ingresan de manera separada, algunos por la parte “de adelante y los otros, por la parte sur de la escuela”.
Además, la directora contó que se rigen por tres tipos de protocolos: el de Nación, el de la provincia y el institucional. Al ingresar los estudiantes “se les toma la temperatura, se higieniza todo lo que traen”. Por ello, en la mochila “tienen que traer lo indispensable: una carpeta, una toallita, barbijo, la botellita de agua”.
Las medidas de higiene son continuas en el establecimiento, sobre todo, baños, SUM y aulas: “se va concientizando a los alumnos que ellos se limpien y el lavado de manos, es continuo”. “Tratamos que sean ámbitos más abiertos, más ventilados”, agregó Vijarra.
De acuerdo con lo que explicó la docente, a los alumnos les cuesta sostener el uso del barbijo y el distanciamiento social: “ellos quieren estar todos juntos”, “les cuesta mantener el distanciamiento, la burbuja”.
“Este 7mo está ansioso de cosas nuevas”. “La virtualidad a ellos le generó esa ansiedad; los videitos, el panel donde podían expresarse, todo lo virtual, los atrapó”. “Entonces ahora vos lo querés hacer trabajar con un cuadernillo que mandó el Ministerio y ellos ya están cansados, no quieren escribir, ya no quieren ese tipo de cosas”, pero “trabajan, le ponen ganas y son la alegría de la escuela”.
Tecnología
En la escuela de hoy, del siglo XXI, el aprender a desenvolverse entre los recursos que la tecnología digital ofrece a los estudiantes y docentes, es todo un desafío: “nadie sabía usar la tecnología”. “Para cada uno de nosotros, fue un aprendizaje y saber usarla en casa. Nos sentimos encerrados y cada uno, empezó a usar lo que tenía como podía”.
Las clases presenciales se suspendieron a partir del 16 de marzo del 2020 en nuestro país, se pasó a educar en un contexto de pandemia, regidos por el aislamiento, se tuvieron que diseñar nuevos esquemas pedagógicos y el teléfono, las computadoras, las clases virtuales, las reuniones por plataformas, bibliotecas virtuales, videos, actividades, clases, debates, exposiciones virtuales, convirtieron al 2020 en un año difícil y distinto: “fue un año distinto”, dijo Alejandra, pero “el chico siguió aprendiendo. Para mí nunca fue un año perdido, fue un año distinto, con cosas positivas y negativas, con errores y con aciertos” y sobre todo se pudo garantizar la continuidad pedagógica.
Ciclo 2021
Sujetos a la continuidad de la pandemia, la vuelta a clases para el ciclo 2021 sigue siendo incierta aún: “nosotros el 15 de marzo, de acuerdo a los lineamientos del Ministerio de Educación, empezamos el ciclo lectivo 2021. El protocolo dice que no podemos más de 15 chicos, por eso, la idea de la escuela es organizar las burbujas que sean con un máximo de 15 alumnos”. “Va haber una semana de presencialidad y una semana no, pero esto no será eterno, esto es el día a día”, se explayó Vijarra.
Respecto a cómo se está preparando la escuela, la directora señaló que se están organizando los “horarios, burbujas, horas especiales”. “Los chicos van a estar tres horas y media en la escuela”. En ese sentido, indicó que la institución y el personal, “quiere empezar con la presencialidad total, porque es donde “nos sentimos cómodos y donde sabemos lo que hacemos”. Pero hay grupos que “no van a poder”. “Creo que vamos a tener que entender que no va a ser la misma escuela de antes, esa escuela, cambió”.
Finalmente, la directora envió un mensaje a los papás: “tengan esperanza, que desde acá, lo que queremos es tener a todos los chicos adentro. Tienen que estar seguros de que vamos a hacer todo lo posible para que participen de la educación de sus hijos, para nosotros, la familia es un pilar, y las necesitamos” concluyó.