Lamentos en el reutemanismo por la decisión del gobernador
De inmediato empezaron a conocerse las repercusiones de su entorno más íntimo. El diputado nacional Julio Gutiérrez relacionó el no de Reutemann con “lo difícil que resulta romper los poderes enquistados, que lamentablemente nos han llevado a tener un Estado quebrado y exhausto”. “Es una lástima porque era un desafío importante para revertir esa situación”, se lamentó.
El actual Presidente de la Cámara de Diputados, Alberto Hammerly, atribuyó la determinación de su líder a “las presiones” de las últimas horas. “Creo que lo han acosado demasiado y no lo han dejado tomar los tiempos que habitualmente él utiliza para decidir y reflexionar. Entonces, reaccionó en consecuencia”.
Sin embargo, Hammerly admitió que tal vez “no quisimos ver las señales” que Reutemann enviaba como presagio de su decisión final. “El mismo había dicho públicamente que su intuición le indicaba la negativa”, recordó el legislador.
Y aunque el gobernador hasta ofreció “dibujar” su negativa, no todos quedaron convencidos. Muchos justicialistas albergan aún una esperanza y sostienen que lo de esta mañana no fue más que otra estrategia. Especulan con que en realidad, Reutemann espera que a último momento, casi rendido a sus pies, el peronismo le pida que sea candidato. El escenario podría implicar un aceleramiento del cronograma electoral y hasta la presentación del santafesino como único postulante del peronismo. El gobernador sería, entonces, el que pone las condiciones.
Menos optimistas, otros dirigentes del PJ aseguran que por la personalidad de Reutemann sería “imposible” que vuelva sobre sus pasos. “No hay marcha atrás. El es un hombre coherente. Su candidatura era algo que estaba en la imaginación de toda la gente, menos en la de él”, confió uno de sus voceros.
Lo cierto es que el escepticismo también alcanzó las filas de la oposición. El presidente del radicalismo provincial, Santiago Mascheroni, reconoció “no tener claro” y ni estar “plenamente convencido” de lo que Reutemann dijo en sus declaraciones.
En Santa Fe también se plantea más de un interrogante. Con no poca fuerza, trascendió que Reutemann podría apelar a su anunciada renuncia como gobernador y ni siquiera concluir su segundo mandato. En el Ministerio de Gobierno dudan también sobre si deben seguir impulsando la reforma constitucional que ya se envió a la Legislatura y que establece la caducidad de los mandatos el 25 de mayo. En el gabinete, a la desilusión se suma la falta de certezas sobre el futuro del gobierno. Ministros, Secretarios y Subsecretarios esperan el retorno de Reutemann -llegaría hoy a la ciudad- para conocer las nuevas instrucciones.
Pero la incertidumbre se mezcla con un consuelo que puede ser una última carta en la manga. Así lo dejó entrever la senadora justicialista, Roxana Latorre: “Esta historia tiene aún un final abierto”.