La Reforma Política cercena las autonomías municipales y recorta la participación democrática
La Reforma Política cercena las autonomías municipales y recorta la participación democrática

La Reforma Política cercena las autonomías municipales y recorta la participación democrática

Es necesario encontrar caminos y criterios despojados de hipocresías demagógicas, para que nuestro Sistema Institucional no sea víctima de un descuartizamiento que solo agrave la situación actual y comprometa aún mas la democracia.

Es evidente que hoy es muy fácil echarle la culpa de todos los problemas que vive nuestra nación a “la política”, a los políticos y especialmente a aquellos que desempeñan funciones en los Poderes legislativos.

Pareciera ser que en este marco nuestro Gobernador, lanzado ya en su carrera presidencialista, no ha elegido el mejor de los caminos.

Reutemann, que ha gobernado nuestra provincia ya mas de seis años, parece haber encontrado la formula para reducir aún mas los márgenes de autonomía municipal, modificando una Ley que jamás propuso tocar ni para ampliar las facultades de gobernabilidad de los municipios, ni para asegurar un sistema de autonomías municipales tal cual lo exige nuestra Constitución Nacional.

Pero como la hipocresía y la demagogia existen hoy en medio de esta crisis es mas fácil hablar de “recortar gastos” que de mejorar y hacer mas eficientes las instituciones.

Se propone entonces minimizar al extremo los Concejos municipales. Que paradoja… En el mismo tiempo que se sostiene la necesidad de abrir canales de participación, de terminar con el monopolio de los partidos en las candidaturas, de buscar el surgimiento de nuevos políticos, se atenta contra existencia de los Concejos Municipales, cuando son éstos las primeras expresiones de las prácticas políticas parlamentarias, aquellas donde le es mas fácil su presentación y participación a cualquier vecino de una ciudad. Precisamente es el ámbito que naturalmente permite mas fácilmente la llegada de expresiones comunitarias, de representantes inclusive de ámbitos no políticos, donde es mas fácilmente reconocer al vecino de la localidad, para darle la responsabilidad de representarnos.

Pretender avanzar aún mas en desmedro de los Concejos Municipales, cuando se habla y pretende una nueva dirigencia política, es como decir que queremos mejorar nuestros profesionales, y mientras tanto debilitamos de manera mortal la escuela o la Educación Pública.

Si los Concejos Municipales han cometido errores, uno de ellos es que precisamente se han dejado y se dejan avasallar por los distintos Ejecutivos, relegando sus facultades, postergando sus iniciativas. Pero, quien puede negar su capacidad de control. ¿A dónde recurren los vecinos cuando se ven afectados en sus derechos o garantías?, ¿Dónde se debaten de manera participativa y plural las distintas expresiones de los problemas ciudadanos?

Por otra parte pretender fijar un límite por ley de lo que pueda destinarse presupuestariamente a los Concejos Municipales, es como intentar trasladar la responsabilidad de la situación de muchos de nuestros municipios al número de concejales o al presupuesto que esos concejos insumen.

Si tanto le preocupa al Gobernador y a los obsecuentes legisladores de la provincia la situación de los Municipios,

¿Porque no busca cumplir con su responsabilidad constitucional, garantizando un sistema transparente y automático de percepción y distribución de ingresos, que le permita conocer a cada municipio cuanto le corresponde de recursos?

Porqué jamás se preocupó el gobernador, ni el justicialismo, para dotar a los municipios de la información necesaria para que sepan cuanto se recauda, y cuanto a cada uno corresponde.

¿Porqué no busca el gobernador terminar con sus políticas discriminatorias de acuerdo al color partidario de quien conduce cada administración?

¿Porqué no dejar de apañar administraciones municipales deficitarias o que sostienen estructuras clientelistas como ha ocurrido en tantos municipios de nuestra provincia que cuentan con el beneplácito del gobierno solamente por ser de su color político?

¿Porqué no se ha trabajado ni desde el Poder Ejecutivo ni desde la Legislatura para una verdadera adecuación de la Ley 2750 (Ley Orgánica de Municipalidades), que beneficie el Régimen Municipal y a la estabilidad institucional y económica de los Municipios.

El mensaje del Gobernador es demagógico, oportunista y atenta contra las autonomías Municipales intentando a la vez cercenar el espacio mas cercano de participación parlamentaria de los ciudadanos, su representación y sus posibilidades de crecimiento individual y colectivo en la actividad política.

Estamos convencidos que resultaría mucho mas acorde a las necesidades del momento y a la debida autonomía de los municipios, buscar mejorar los mecanismos institucionales para hacer las cosas con mayores equilibrios y no sumarse al discurso oportunista de pretender cargar las tintas de las responsabilidades del gasto público, al llamado gasto político, buscando justificar la desaparición de aquellas instancias que realmente permiten la participación que hoy se declama.

Es verdad, hay que mejorar nuestras instituciones, hay que terminar con los privilegios, hay que dotarlas de eficiencia, hay que mejorar los recursos de nuestros municipios, hay que dotarlos de mayor autonomía, hay que evitar que los mismos incurran en gastos no acordes a sus presupuestos, pero no hay que actuar de manera demagógica ni apresurada o interesada.

No vaya a ser, que lo que pretende mostrarse un avance hacia una “nueva política” termine siendo la consolidación de aquella “vieja política” de la dedocracia y la digitación de candidatos o delfines, evitando los mecanismos mas eficientes para el surgimiento de nuevos dirigentes que puedan moverle la estantería a los que hoy pretenden a toda costa mantenerse en ella.

Deberemos entonces, concejales de todas las ciudades, de todos los partidos exigir nuestra participación en esta discusión. Ponernos a disposición para encontrar caminos que se desprendan de la demagogia de algunos y de la vocación por mantener sus privilegios de otros. Ayudar a generar una verdadera Reforma Política que pueda aumentar la eficiencia y reducir gastos, pero que no sea un recorte a la Democracia.

Leonardo Simoniello-Concejal de la ciudad de Santa Fe

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