Kirchner castigó a Menem y Duhalde
Consultado por la prensa, el mandatario objetó el “funcionamiento del pejotismo burocrático, que hoy está al servicio de los caprichos del ex presidente (Carlos Menem), que no sólo le ha hecho un grave daño al país, sino que se empeña en destruir al PJ”.
Sobre la reunión con Reutemann, dijo que pasó a “saludarlo” aunque admitió que también discutieron otros temas vinculados a deudas de la Nación con las provincias y a la discusión sobre un nuevo régimen de coparticipación.
Kirchner eludió responder si jugará por fuera o por dentro de las estructuras partidarias del Justicialismo. “Yo soy partidario de hacer un frente nacional, popular y progresista, del cual el Peronismo tiene que ser su eje, y donde hay que sumar a todas las fuerzas progresistas de la Argentina para generar una alternativa a este sistema que nos llevó a esta exclusión, a esta indigencia y a esta desocupación”. Sostuvo que dicho frente podrá estar integrado con “buenos peronistas, buenos socialistas, buenos radicales, y con todos aquellos que forman parte del campo nacional”.
El mandatario coincidió con De la Sota en señalar que el desánimo de la gente “es total”. “Como no van a estar desanimados si acá siguen viendo las mismas metodologías y las misma actitudes corporativas y cuasi mafiosas del pasado. Hay que reconstruir la esperanza pero eso se hace con verdad, y también asumiendo las culpas y las responsabilidades de cada uno”.
Sobre la realización de internas abiertas dijo ser partidario de “elecciones primarias, donde vote todo el padrón”. “Estoy cansado del corralito político, del capricho y de que quieran adecuar el sombrero a la cabeza. Me parece que acá se están haciendo lugar a todos los caprichos que tiene el ex presidente Menem”.
Con dureza y consultado sobre en qué se diferencia Kirchner, Menem y Duhalde, el gobernador de Santa Cruz señaló: “Yo tengo una historia clara, tengo historia y no prontuario”.
Consultado sobre Reutemann, dijo que siempre mantuvo una buena relación pero se fue en evasivas al ser consultado sobre el origen del encuentro.
“Nos llamamos siempre, hoy vino porque estoy en la provincia de Santa Fe. La vez anterior no pasé por aquí porque él (el gobernador) estaba convaleciente”.
De todos modos, aseveró que “no vine a pedir la bendición de Reutemann, eso sería una falta de respeto para él y para mí”.